Hay que regresar...

Hay que regresar de tanta exterioridad

A jugar con nuestro niño interior

A encontrar lo que se perdió

A las fuerzas; los sueños, el cambio, la realidad.

Hay que regresar del zapping sin cesar

Pantallas, flashes… vacío… banalidad

Mentes atacadas, imaginación encadenada

Caen ante la caja, ávidos de novedad

Hay que regresar a la belleza natural

La belleza sin implantes; el carácter, la personalidad

Una vívida sonrisa y el sol en un cabello

La luna, un lirio; un único destello

Hay que regresar a la humildad

Espada de la vida, cualidad esencial

Enemiga del orgullo, sabiduría en el pensar

Protectora del hombre que busca senderos de verdad

Hay que regresar a la humanidad

Darle forma de autentica dignidad

A realizar la aventura individual

En el amplio corazón de la comunidad

Hay que regresar al prójimo

Tomarnos de su mano para andar

El apoyo de su hombro para llorar

A revitalizarnos con su aliento… una y mil veces más

Hay que regresar a la libertad

Tomar lo mejor de uno para continuar

Sin olvidar para revisar… Memoria!

Venir desde la historia a realizarse en integridad

Hay que regresar…
Con confianza y seguridad

Con justicia al hablar

A la experiencia del sabio

A las palabras del anciano

Hay que regresar…

Con una melodía al silbar

Con respeto al escuchar

Con el esfuerzo a cuestas

Y con ansias de cambiar

Regresar a la vida

Reinterpretar

Volver al pensamiento

Críticos, a ser en la solidaridad

Es el eterno regreso al amor

A ese que no claudica jamás

Para sufrir y soportar

Para creer y esperar

Hay que volver a amar…

Porque allí están las armas

Ser la mismísima eternidad

De esa inmensa profundidad

Que se contrae y se dilata

Y estalla en divinidad

Hay que regresar… para comenzar.

GGK - 27/5/2011